Los mosquitos son más que un fastidio
17.06.2019Protección ante plagas en bibliotecas y archivos
14.08.2019Las plagas en la rehabilitación de edificios se han convertido en un factor a tener en cuenta en muchos de los trabajos de reformas de edificios debido a la edad de los mismos y, en ocasiones, al estado de descuido.
Plagas&Control colabora con arquitectos y empresas de rehabilitación en proyectos en los que se hace necesaria su intervención para acabar con los problemas de plagas detectados. En la mayoría de las ocasiones en las que hay que acometer una obra profunda de rehabilitación nos encontramos con problemas de plagas, fundamentalmente de xilófagos (carcomas y termitas) y hongos de pudrición que afectan a distintos elementos estructurales de madera.
Los profesionales se enfrentan en su día a día a los retos que las plagas plantean en reformas de pisos y edificios. La experiencia en la intervención de trabajos de este tipo es algo que ayuda a realizar un diagnóstico del estado global de la estructura y a tomar mejores decisiones. Pero para poder recuperar estas estructuras se necesitan datos empíricos. En particular, es fundamental saber exactamente cuál es la perdida de sección en cada elemento que provocan las carcomas y algo especialmente delicado es saber si hay elementos con ataque de plaga en el duramen. Esto es crítico ya que este ataque no se detecta a simple vista.
Para la obtención de todos estos datos imprescindibles siempre se puede contar con Plagas&Control, empresa con una amplia experiencia en este campo.
Estamos certificados y elaboramos informes sobre la identificación de los agentes que causan los daños, detectamos la reducción de la sección útil de la estructura y acompañamos durante el diseño de los métodos de tratamiento. Así mismo, clasificamos cada elemento estructural, ya sea pilar, durmiente, jácena o vigueta, identificando aquellos que no son recuperables.
Para recuperar una estructura de madera centenaria, buscando hacerla portante con los requerimientos de la normativa actual, la mayor parte de las patologías en la estructura de madera se detectan a simple vista. En general, la primera cruje, la más cercana a la fachada, es la que tiene mejores condiciones de ventilación y soleamiento, y siempre es la que está más seca. En esta zona es habitual encontrarse con anóbidos, que no necesitan humedad para su desarrollo. Estas carcomas provocan una reducción de la sección útil del elemento estructural.
Las crujías interiores, sin embargo, son las que han alojado tradicionalmente las zonas húmedas y es allí donde los hongos xilófagos producen más daño. La experiencia es un grado y Plagas&Control puede ayudarte a la valoración general del estado de la estructura en una primera inspección visual detallada.
Tras la detección del problema y la valoración de Plagas&Control, se lleva a cabo un tratamiento contra carcoma y hongos xilófagos en el que en primer lugar se limpia toda la estructura con azuela. Este procedimiento, si la obra en particular es factible y se puede, es mejor realizarlo con chorro de arena, ya que de esta forma el tratamiento superficial es más homogéneo y satinado.
Después y conforme a la clase de uso asignada, se dictaminó que el nivel de protección a aplicar debía ser total para llegar así a la albura. Se colocaron válvulas al tresbolillo a una distancia aproximada de 30 cm en todo el maderamen. A través de esas válvulas se garantiza la penetración total del producto fungicida en toda la sección mediante inyección a presión a través de las válvulas. Posteriormente se pulverizan las superficies accesibles de las piezas con producto protector para terminar con la aplicación final del lásur a poro abierto.
En la actualidad se suelen encontrar estructuras de madera centenaria que pueden suscitar la prescripción de un derribo masivo de la madera centenaria, pero que estableciendo un buen método y respetándolo durante la fase de ejecución, llevarían a la salvación de la madera original que puede aportar prestaciones inesperadas y resultados comparables al de estructuras nuevas.